Esto contrasta con las valoraciones de las acciones de la India, que se encuentran entre las más caras del mundo. El rendimiento de las ganancias del S&P BSE Sensex, del 4,9%, palidece frente al rendimiento del bono de referencia a ten años del 7,1%, lo que significa que los inversores no reciben compensación por el riesgo adicional que asumen con las acciones. Las vertiginosas ganancias de las acciones han provocado advertencias de los bancos de inversión, incluidos Citigroup Inc. y Societe Generale, y también la atención de los reguladores del mercado native.